Aunque el caucho o hule ya se usaba desde épocas precolombinas para fabricar balones, suelas de sandalia, bandas de goma o como una cubierta impermeable para ciertos recipientes, no fue hasta que se descubrió el proceso de vulcanización que empezó a utilizarse de manera industrial, especialmente en el sector automotriz.
Grosso modo, el vulcanizado es un proceso en el que el caucho crudo se calienta junto con el azufre para que las moléculas de ambos materiales se unan para hacer otro compuesto más durable, resistente a los líquidos y conservando su elasticidad natural.
También conocida como ‘curado’, la vulcanización es un refinamiento que puede hacerse con otros materiales para darle propiedades únicas al hule, como resistencia eléctrica o mayor dureza, y cuyo resultado es irreversible.
Durante el Siglo XIX, con el desarrollo del carro o automóvil, los diversos inventores exploraron diferentes materiales para usarlos como ruedas, incluido el hule; sin embargo, debido a las condiciones del suelo, la fricción, el peso y la temperatura del medio ambiente, el hule se volvía pegajoso y se adherían escombros a las llantas, haciéndolo inviable o de poca duración para esta industria.
Fue hasta la década de 1830, cuando el estadounidense Charles Goodyear empezó a trabajar en la mejora de neumáticos hechos con hule; no se sabe a ciencia cierta si fue un descubrimiento como resultado de una investigación o si fue un hallazgo fortuito, pero a él se le atribuye la invención de la vulcanización.
Durante esos años ya se mezclaba caucho caliente con otros productos químicos para obtener diferentes compuestos más duraderos; sin embargo, esto debía a la propia naturaleza del hule y no tanto de los otros elementos.
En 1839, según la versión más aceptada, cuando Goodyear intentaba mezclar caucho con azufre, accidentalmente dejó caer la mezcla en una sartén caliente, para su asombro, en lugar de derretirse más o vaporizarse, la goma se mantuvo firme y, a medida que aumentaba el calor, la goma se endurecía.
A este proceso lo llamo vulcanización debido al calor involucrado para obtener el hule curado. Pese a esto, la primera persona en patentar este método fue Thomas Hancock, quien en 1843 se atribuyó este descubrimiento en Reino Unido.
Actualmente, la vulcanización es uno de los procesos de curación más económicos y simples en el mercado para fabricar neumáticos y diversos artículos como mangueras, juntas, grommets, entre otras piezas.
Algunos de sus beneficios es que se mejoran las propiedades naturales de hule, como elasticidad, resistencia al aire, impermeabilidad y maleabilidad.
En la industria hay otros métodos como la vulcanización del caucho neopreno o policloropreno, con el cual se usan óxidos metálicos en vez de los compuestos de azufre, con el fin de darle otras propiedades que son de provecho en diversas industrias.
